lunes, 18 de junio de 2012

CONTACT (1997)

Me resultaba extraño e impropio de mí, llevar tantas entradas en el blog y no haber hablado de una de las películas que más me ha marcado en estos 25 años. No recuerdo exactamente en que año vi el film, pero si conservo aún la cinta de vídeo dónde la grabé la segunda vez que la pude ver en televisión. Tan impresionada y deslumbrada quedé con mi primer visionado, que no tardé mucho en localizar el libro en el que está basada, una novela del astrofísico Carl Sagan. En esta ocasión libro y película difieren mucho más de lo que deberían pero, una vez leído el libro, se entienden esos "recortes" y "cambios" como necesarios.




"CONTACT" es una obra maestra de la ciencia-ficción, por muy infravalorada que esté, no he visto aún una película que trate con tal sencillez y realismo la pregunta que tantas veces nos hemos hecho los seres humanos: ¿estamos solos en el Universo? Creo que ese menosprecio a "Contact" viene dado porque la inmensa mayoría de películas que tratan el tema de la vida extraterrestre, dejan de lado el romanticismo que esta idea evoca y se valen de los efectos especiales, de la forma del "thriller" o de introducir feroces alienígenas para captar la atención de los espectadores. No digo que sea malo, pero si buscas algo así cuando ves esta película, acabarás defraudado y aburrido, "Contact" es algo más que un derroche de acción, es una película para hacerte preguntas, para valorar lo que tenemos, lo que somos y lo que podemos ser.

La película se centra en el personaje de Eleanor Arroway, una científica obsesionada por la búsqueda de vida extraterrestre, interpretada por una magnífica Jodie Foster. Ellie es una persona que ha sufrido mucho durante su vida, la temprana muerte de su padre, centro de su universo particular, la lleva a volcar toda su vida en aquello que compartían, la observación del cielo. Al igual que aquellos que creen en la existencia de un alma gemela, de un Dios todopoderoso, Ellie siente en lo más profundo de su ser que hay algo ahí fuera, que la soledad que reina en su vida tiene una explicación científica, que su búsqueda colmará ese vacío. La película es una muestra de que la perseverancia, el esfuerzo y la devoción tienen su recompensa. A pesar de que existan personas como el Dr. Drumlin (Tom Skerritt) o al Agente Kitz (James Woods), que nos muestren las injusticias que nos podemos encontrar a nuestro paso, la superación de las mismas es lo que hace que todo merezca la pena. 

Uno de los puntos con los que se juega a lo largo de todo el film, es esa eterna lucha ciencia-religión por tratar de dar repuesta a las preguntas existenciales que se plantean la protagonista y el resto de los personajes. Ahí encontramos la contraposición entre Ellie, demasiado racional para creer en algo tan intangible como la existencia de un ser omnipresente y todopoderoso, y Palmer (Matthew McConaughey), hombre de fe que intenta hacer entender a Ellie que hay vacíos que la ciencia no puede llenar...-"¿Querías a tu padre?"-"Muchísimo" -"Demuéstralo". El fanatismo religioso también está presente en la película. Cuando se descubre el famoso mensaje de Vega, multitud de curiosos se congregan en el observatorio de Nuevo México para ser parte de los acontecimientos, entre ellos, radicales que se escudan en la fe para explicar sus acciones de venganza y represalia, "La ciencia ha matado a Dios", reclaman. 

¿Sabes esa sensación cuando ves una película en la que hay muchas cosas que no encajan o no han sabido explicar adecuadamente al espectador? Pues Robert Zemeckis se ha asegurado de que eso no te ocurra viendo "Contact", la adaptación del libro es sensacional en ese sentido, consigue que conceptos tan complicados como los agujeros de gusano o las nebulosas, resulten fáciles de intuir al espectador. Además, la narración es tan fluida y sencilla de seguir y llegas a identificarte de tal forma con la protagonista, que cuando se encuentra con su "padre" en esa paradisíaca playa que han creado a raíz de sus recuerdos, e intenta ser lo más profesional posible, no puedes evitar emocionarte, pensar "qué típico de Ellie" y desilusionarte al igual que ella cuando le explican que ese sólo ha sido un primer contacto, que aún no estamos preparados para más... y ahora toca volver a casa.

Podría estar hablando eternamente de todos los detalles que me gustan, encantan y sobrecogen de la película: la escena en la que Ellie intenta localizar a su padre ya fallecido con la radio ("CQ, CQ,.."), el momento en el que pierde el control ante los responsables de inversión de S. R. Hadden (John Hurt), la conversación con Palmer en Arecibo ("Si de verdad estamos solos, ¿cuánto espacio desaprovechado, no?" "Amén"), la carrera a contrarreloj cuando empieza a escuchar el mensaje bajo las antenas de Nuevo México, el intento de imponerse en la Casa Blanca cuando ve que "su" descubrimiento se lo quitan de las manos, la Navaja de Occam, las seis horas de grabación,... Y hasta aquí el análisis (más personal de lo que debiera) de por qué "Contact" es mi película favorita...


Pilar

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